ventana.
no me tocó ventana.
premio consuelo:
nunca es bueno apoyar la cabeza contra el vidrio.
tiembla, lo sabemos todos.
libro. (admitamos: nos hemos convertido en lectores transeúntes)
no hay libro.
premio consuelo:
leer en el colectivo y sin anteojos marea.
tiembla, lo sabemos todos.
pensamiento banal. (para variar)
no se me ocurre.
premio consuelo:
se divisa a lo lejos Cabildo y Juramento y ahí me bajo.
zafé por un poquito de tener que enfrentarme al temblor de las cosas importantes.
ufff.
1 comentario:
Tengo mil años de experiencia en esos maléficos medios de transporte (será por eso que me copé con tu blog?) y cargo con la cruz de no poder leer más de dos minutos sin que me empiece a sentir muy mal. El colectivo no es compatible con la literatura y eso se nota conversando con los queridos choferes :D
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