Y uno viene a enterarse de tamañas cosas a esta altura de la vida!
Heme aquí habiendo ignorado durante tantos años que: el gas naturalmente no tiene olor, lo que conocemos por olor a gas es un agregado artificial para hacerlo reconocible ante una pérdida o filtración.
Hasta ahí, curioso.
Pero, imaginemos un instante... El encargado de elegir el olor para el gas tiene que haber seguido algunas pautas un tanto extrañas.
Para empezar, que no sea el olor de ninguna otra cosa para que no se confunda. Eso ya es raro... porque... alguien conoce un olor que no sea de nada?
Para seguir, el olor debe ser desagradable, no sea que dejemos prendido el horno y nos colguemos una hora a disfrutar del aroma que de paso nos deja medio groguis.
Tiene que haber catado varios, varios olores muy feos, y después elegir uno. Por qué ese y no otro?
Y como para culminar, tiene que haber convencido al mundo entero de que ese era el mejor, y hacer que efectivamente todos le pusieran ese olor a sus gases... como para que un chino no se muriera intoxicado en argentina vio?
No sólo curioso, también increíble... hace una semana que busco y busco, pero no encuentro ninguna otra convención mundial olfativa!! WTF??
1 comentario:
Me mató este dato amiga.
Te quiero y escribí más seguido!!Que me encanta leerte.
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