jueves, 21 de octubre de 2010

La idea fija

N. de A. (siempre quise escribir una nota de autor)
Viene Rodrigo y me dice "estuve pensando en algo que tenés que escribir en tu blog". 

Siempre que me cruzo con esa frase me resulta vertiginoso seguir la conversación. Hay dos opciones: 1) o lo que sigue es genial (lo cual sucede bastante poco, casi nunca mejor dicho), o 2)  lo que sigue no tiene nada que ver con el blog, y además es tan malo tan malo que me da vergüenza ajena.
Si el que se da es el segundo caso, debo admitir que es difícil zafarla, así que va sonrisita y nadie vuelve a hablar del asunto, salvo que, como ya me ha sucedido, al tiempo me caiga un gran "al final nunca escribiste lo que yo te dije". Ahí va sincericidio, porque si un posteo va a ser horrible, por lo menos que sea mio.
En cambio, si el que se da es el primer caso, me pongo toda contenta, pocas cosas me resultan tan satisfactorias como que alguien me cuente una idea que me hubiera gustado tener a mi misma, me produce admiración, complicidad, respeto... que se yo. Quizás sea una boludez.

La cuestión es que Rodrigo hizo una observación encantadora, y acá está:

La idea fija

A quién no le pasó de viajar en subte y ver subirse al vagón a un chico con una canasta de mimbre gigante vendiendo bandejas de galletitas, al tiempo que explica que es miembro de una granja de rehabilitación de drogas, que los productos que ofrece fueron hechos por sus manos y las de sus compañeros, que la plata que recaudan se utiliza para seguir manteniendo el espacio y así poder ayudar a muchos chicos que lo necesitan. Hasta ahí todo bien. 
Lo que resulta extraño y digno de psicoanálisis es que las galletas que preparan y venden se llamen "pepas" y "polvorones".... lo único que falta es que venga uno y te ofrezca un "churro". Así no se puede viejo, así no se puede.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

noooooooooooooooo! no me habia dado cuenta.... ajajjaja

Staff de Bla Bla Bla dijo...

Les estará jugando una mala pasada el subconsciente?
Abrazo

Dicotomínica dijo...

fija